Energía
El 80% de la energía que consumimos se obtiene quemando combustibles fósiles. Nuestro modelo energético es responsable de generar aproximadamente el 75% de las emisiones de gases de efecto invernadero. Por ello, la reducción de estas emisiones se convierte en nuestro principal objetivo.
¿Cómo podemos utilizar energía sin quemar combustibles fósiles?
La transición energética implica cambiar la forma en que producimos, distribuimos y consumimos energía. Pero empecemos por el final: “la forma en la que consumimos”, en efecto: tenemos que comenzar evitando el despilfarro energético con un consumo responsable y la mejora de la eficiencia energética. El objetivo es reducir la dependencia de los combustibles fósiles y avanzar hacia fuentes de energía más limpias y baratas.
La buenísima noticia es que este objetivo no solo contribuye a la lucha contra el cambio climático, sino que también promueve el desarrollo económico, el ahorro (las energías renovables son las más baratas), la eficiencia energética, la independencia y la mejora de la calidad de vida. ¿A qué estamos esperando? La transición a las energías limpias mejora todos y cada uno de los ámbitos de nuestra vida.
El Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2021-2030 (PNIEC) y la Ley 7/2021, de cambio climático y transición energética son parte de la estrategia de España para abordar el cambio climático. Establecen una serie de medidas para acelerar la transición hacia una economía baja en carbono y cumplir con los compromisos internacionales de reducción de emisiones.
Soluciones
Te asomas a la azotea de tu edificio y todos los tejados están llenos de paneles fotovoltaicos y minieólicas que generan la electricidad que necesita el barrio.
La bomba de calor ha sustituido las viejas calderas de combustión en todas las viviendas de tu barrio. Reduciendo notablemente tu factura energética y dejando de producir hasta un 70% menos de emisiones de CO2.
Las calles, que una vez estuvieron adornadas con luces deslumbrantes y llenas de comercios con puertas abiertas de par en par, mientras que la calefacción estaba a pleno rendimiento… ahora son testigos de una poderosa transformación silenciosa.
En tu ciudad cada edificio es un hogar eficiente y acogedor. El aislamiento de ventanas y fachadas es impecable y la factura de luz se reduce drásticamente. La pobreza energética es historia.
Las personas del vecindario celebran, junto a su cooperativa sin ánimo de lucro o la empresa pública de energía renovable, que han conseguido reducir el malgasto de energía y que se ha erradicado la pobreza energética.
Tu barrio produce más energía de la que puede consumir, tanta energía que la puede vender o compartir con otras áreas urbanas.
Materiales de construcción regenerativos
Los materiales que utilizamos para las nuevas construcciones capturan carbono y son más resistentes que el acero
Arquitectura bioclimática
Las nuevas viviendas se construyen con diseños que aprovechan los recursos naturales y las condiciones del entorno, y así reducir drásticamente la necesidad de energía para climatizar el hogar.
Aprovechamiento del agua en edificaciones
Los edificios aprovechan el agua de lluvia y las aguas grises tanto para su propio consumo como para el riego de los tejados y cubiertas verdes.
Mejora de la eficiencia energética del parque de electrodomésticos
Los electrodomésticos más eficientes son ya los más baratos.
Colegios, centros de salud, el centro cultural, todos los edificios públicos llevan por bandera la eficiencia energética. Por el bienestar de su gente, de tu gente.
Tu ayuntamiento ha conseguido que el sueño de cualquiera se convierta en la realidad de personas con bajos recursos. viviendas de diseño y máxima eficiencia energética disponibles para alquiler social.
Compromisos y hoja de ruta para la Neutralidad climática
Una sola bomba de calor colosal calienta las 100.000 viviendas de tu barrio. Usa el agua residual paras ser más eficiente.
Los campos solares no sólo nos ofrecen energía limpia, están llenos de vida, cultivos, apicultura, pastoreo dirigido…